Le Fabian des Baux
Les Baux-de-Provence - Route Départementale 5
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En el corazón del Parque Natural Regional de los Alpilles, Les Baux-de-Provence es un pueblo que figura en la lista de los Pueblos Más Bonitos de Francia. Encaramado en un espolón rocoso y dominado por una vasta fortaleza hoy en ruinas, posee un patrimonio arquitectónico increíblemente rico, con no menos de 22 monumentos históricos.
Este pueblo es sin duda uno de los lugares más extraordinarios de la Provenza. Llegando desde Saint-Remy por una carretera serpenteante en medio del maquis, sin previo aviso aparecerá ante tus ojos este maravilloso nido de águilas, rojo y luminoso bajo los colores cambiantes de la puesta de sol.
Aquí, el tiempo parece detenerse en la época de los barones que se rebelaron contra Luis XIII y sufrieron la feroz represión de Richelieu, con la demolición parcial del castillo. Pasear por las tranquilas callejuelas es realmente emocionante. Afortunadamente, este pueblo aún no se ha convertido en objeto de explotación salvaje por parte de la maquinaria turística y, salvo algunas pequeñas tiendas, todo resuena antiguo y auténtico.
Situado en un promontorio rocoso y clasificado entre los pueblos más bonitos de Francia, Les Baux de Provence se ha convertido en una visita turística obligada, con casi 1,5 millones de visitantes al año.
Este pueblo cargado de historia te seducirá tanto por su increíble panorama como por su amor al arte, que ha hecho de esta localidad un verdadero museo al aire libre. De hecho, hay nada menos que 22 monumentos históricos y 3 edificios religiosos que visitar. Les-Baux-de-Provence también ha dado su nombre a una de las denominaciones más recientes del viñedo provenzal.
Las ruinas del castillo dominan el pueblo. Con la ayuda de una audioguía y varios paneles explicativos, puedes explorar los distintos restos con total autonomía admirando la torre del homenaje (aún bien protegida), las casas trogloditas, el palomar, la capilla del castillo, el molino de viento o la torre sarracena. En el interior de la iglesia de Saint-Blaise, aprenderás más cosas sobre el pueblo, gracias a la proyección de una película que cuenta la historia de Les Baux-de-Provence.
Durante la temporada estival tienen lugar numerosos eventos, como las Médiévales des Baux, de finales de marzo a finales de agosto, los Secrets d’Artisans todos los fines de semana de septiembre y Les Automnales en octubre, que transforman la fortaleza en un lugar rebosante de vida.
Además, el castillo de Les Baux ofrece un panorama increíble sobre los Alpilles y los paisajes de Provenza hasta el mar. Para los niños de 7 a 12 años, se ha diseñado una caza de enigmas, una herramienta lúdica para ayudarles a descubrir el castillo y su historia, en busca de pistas ocultas.
Estas monumentales canteras de piedra caliza situadas a las afueras del pueblo de Les Baux-de-Provence acogen exposiciones emocionantes y siempre cambiantes.
Las canteras se utilizaron para la construcción de la ciudad de Les Baux y su castillo. Pero en 1935 cerraron por falta de rentabilidad. En los años 60, encontraron una nueva función gracias al visionario Jean Cocteau, que decidió utilizar este escenario en su película Le Testament d’Orphée.
En 1977 comenzaron los primeros espectáculos audiovisuales, aprovechando los muros de 14 metros de altura y una superficie de 7.000 metros cuadrados en la que se instalaron 100 videoproyectores y más de 27 altavoces. Esto crea una verdadera inmersión en un mundo artístico completamente único.
Representaciones de grandes obras maestras de la historia del arte y de artistas atemporales como Monet, Leonardo da Vinci, Klimt, Chagall, Van Gogh, Picasso o Dalí, que cobran vida en más de siete mil metros cuadrados de suelos, paredes y pilares.
Una experiencia que no te puedes perder
Construida entre los siglos XII y XVI, la iglesia de Saint-Vincent es la iglesia parroquial del pueblo de Les Baux-de-Provence. De estilo románico, está excavada en la roca. De hecho, la iglesia tiene la peculiaridad de ser en parte troglodita.
En su interior puedes ver modernas vidrieras de Max Ingrand, donadas por el príncipe Rainiero III de Mónaco a la ciudad.
Situado en el antiguo cuerpo de guardia del siglo XVI, este museo reúne colecciones de santón desde el siglo XVII hasta nuestros días. Admirarás un universo en miniatura, poblado por unos 400 santones, las pequeñas estatuillas emblemáticas de Provenza que componen los belenes locales.
Descubrirás el minucioso trabajo de los artesanos que han reproducido escenas increíblemente realistas y minuciosas: 500 m2 de belenes tradicionales del convento de las Carmelitas de Aviñón.
Piensa que en su día fue la única puerta de carruajes del pueblo y, por tanto, el único acceso al pueblo hasta 1866. Los habitantes pasaban por ella en busca de agua en el Vallon de la Fontaine.
Este palacio, que data del siglo XVI, fue propiedad de una de las familias nobles más prestigiosas de Provenza. Hoy alberga un museo dedicado a Yves Brayer, ilustre pintor, ilustrador y escenógrafo francés que decoró especialmente la capilla de los Penitentes Blancos.
Este museo alberga cientos de pinturas y dibujos del artista, realizados entre 1991 y 1997. En la planta baja, se pueden admirar graciosos frescos del siglo XVII y sus ventanas ajimezadas de dos luces, dentro de esta residencia que ha sido descrita como uno de los edificios más bellos de Les Baux-de-Provence.
Está situada al borde del acantilado que domina el Vallon de la Fontaine. Construido en el siglo XVII por la Cofradía de los Penitentes Blancos, pasó a manos de las Cofradías del Languedoc.
En su interior, podrás admirar un sublime fresco de 1974 , obra de Yves Brayer. Éste representa la Navidad de los Pastores en la tradición provenzal.
Maestro tipógrafo, grabador, impresor y editor de talento, Louis Jou es uno de los artistas pioneros de la ciudad. El hotel renacentista Jean de Brion ha sido armoniosamente restaurado por este artista de talento, que tanto contribuyó a la conservación del pueblo y a su nuevo renacimiento.
En el Vallon de la Fontaine, cerca del antiguo lavadero, encontrarás este elegante pabellón esquinero de estilo renacentista.
Fue construido por Jeanne de Quiqueran, esposa de Honoré des Martins, barón de Baux de 1568 a 1581. Antiguamente adornaba un jardín perteneciente a la familia Baux.
En el siguiente mapa puedes ver la ubicación de los principales lugares de interés de este artículo.
El paisaje del valle que rodea el pueblo de Les Baux-de-Provence está cubierto de grandes viñedos. Para aprenderlo todo sobre la historia y la cultura del vino, puedes visitar el Mas Sainte Berthe y el Mas de la Dame, que compartirán contigo sus conocimientos centenarios proponiéndote, por ejemplo, un recorrido a pie, una visita a la bodega o una degustación de las distintas variedades de uva provenzales.
Situado en el corazón de la Provenza, el Parque Natural y Regional de los Alpilles ofrece paisajes excepcionales y una variada fauna y flora para descubrir a pie, en bicicleta o incluso a caballo.
Algunos de los senderos de los Alpilles atraviesan también el territorio de Baux-de-Provence y te permitirán embarcarte en hermosos recorridos como:
El pueblo de Les Baux-de-Provence es muy pequeño y las instalaciones hoteleras escasas: conviene reservar con mucha antelación, sobre todo durante los acontecimientos que animan el pueblo.
Como alternativa, puedes encontrar un hotel con encanto rodeado de viñedos y olivares. O visitarlo en una excursión de un día haciendo base en una de las ciudades más cercanas, como Arlés o Aviñón.
Situada entre el Luberon y la Camarga, Les Baux-de-Provence está a sólo 3½ horas de Toulouse, 3 horas de Lyon y 1 hora de Marsella o Aix-en-Provence. Las ciudades de Arlés y Aviñón también están a poca distancia, a unos 30 minutos de este encantador pueblo.
Los aeropuertos de Marsella y Niza son los más cercanos. Después de alquilar un coche in situ, puedes conducir hasta Les Baux-de-Provence
¿Qué tiempo hace en Les Baux-de-Provence? A continuación se muestran las temperaturas y el pronóstico del tiempo en Les Baux-de-Provence para los próximos días.
El pequeño pueblo está situado en una colina rocosa dominada por un antiguo castillo, al sur de Aviñón y al noreste de Arlés.
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